Nuestro tercer día amanecía con una visita obligada para todos los amantes del fútbol... el templo de este deporte... Maracaná!!! Incluso si no te gusta el fútbol, la visita merece la pena por la grandiosidad del estadio y la historia e importancia que tiene en Brasil, ya que es el más grande del país y lo fue del mundo durante mucho tiempo! En el Mundial de 1950 casi 200.000 espectadores se congregaron para asistir al partido Brasil-Uruguay!!! Hoy en día la capacidad del estadio es menor, ya que muchas de las antiguas localidades eran de pie y ahora todo el mundo está sentado. No obstante, aunque nosotros lo visitamos por la mañana en un tour, debe de ser impresionante verlo lleno!!
Como siempre, Diego se encargó de buscar el autobús que nos llevaría hasta allí desde nuestro hotel. El trayecto fue bastante largo y pasamos por barrios con grafitis chulos (ya sabéis que el street art es mi perdición!) que fotografié como pude desde el autobús - rally
Cuando llegamos a Maracaná, Diego estaba súper emocionado. Hicimos unas cotillos fuera y después dentamos dentro. Para enterarnos mejor de la visita, llevamos audioguía y comenzamos visitando la planta baja, que es donde hay trofeos, camisetas de equipos y la mascota de la Copa del Mundo 2014, que se celebró en Brasil. No recuerdo cuánto nos costó la entrada, guardé los tickets, pero con el paso del tiempo se han borrado los importes.
El personal del Estadio era súper amable y en todo momento estaban disponibles a ayudarte!
En la planta baja también se encontraba la sala de prensa (donde nos hicimos la típica foto) y también tenían un invento para hacerte una foto de 180º, sujetando el trofeo del mundial. Yo me puse la bandera de Brasil y Diego la de España, y nos colocaron de manera muy "profesional":
Luego ya salimos al exterior, a la zona del césped y gradas. Diego se llevó la bufanda del Equipo del barrio, el CF Canillejas, y se hizo la foto de rigor para mandarla a sus compañeros
En la audioguía explicaban que el campo tiene un sistema de recogida de agua de lluvia para regar el césped. También pudimos comprobar lo cómodas que eran las gradas y vimos los banquillos y puerta por donde salen los jugadores.
A continuación subimos a una zona más alta de gradas donde seguimos haciendo fotos y escuchando las explicaciones de la audioguía, en su mayoría, datos curiosos del estadio.
Después de la visita, nos dirigimos a la parada del metro que está al lado del estadio. Nos íbamos a la zona centro, en concreto a la parada de Uruguaiana. Nuestra idea esta darnos una vuelta por Feira Saara y comer algo por la zona. Habíamos visto que era una zona guay para compras, pero cuando llegamos fue como llegar al paraíso!! Se trata de una feria al aire libre, que ocupa varias calles del centro de Rio. Su origen se remonta a los años 60 cuando comerciantes abrieron en esta zona sus negocios. La actividad comercial fue expandiéndose hasta lo que es hoy, y se encuentran más de 600 tiendas con artículos de ropa, calzado, regalos, artículos del hogar, herramientas, accesorios.... y todo a muy buen precio!
Después de dar una buena vuelta (y decidir que realizaríamos nuestras compras por aquí más adelante) y comer en una lanchonette, volvimos al metro para dirigirnos de nuevo a Pão de Açucar, esta vez con la batería de la cámara a tope. Así que os podéis imaginar, saqué todas las fotos que pude!!
Cogimos el teleférico que cubre el primer tramo de subida, hasta la montaña más baja. Incluso grabé la subida!! Tenía que hacer que esta segunda visita al Pão de Açucar mereciese la pena! La calidad del vídeo no es muy buena, así que mejor verlo sin maximizar la pantalla.
En esta primera montaña hay un helipuerto para "la gente top" que realiza visitas panorámicas en helicóptero por la ciudad de Rio.
Las vistas son impresionantes ya en este primer tramo. Se ve el Cristo Redentor a lo lejos, Botafogo, el puente que une Rio con Nitéroi, un poquito de la Urbanización URCA...
Después de sacar unas cuantas fotos, nos fuimos a coger el teleférico para subir al morro más alto.
Si las vistas de antes eran impresionantes, las de ahora no tenían calificativo!!
Es una pena que estuviese nuboso, un atardecer despejado debe ser espectacular!
La bajada la pude grabar completa, primero un ramo y después el otro. A diferencia del funicular de Table Mountain en Ciudad del Cabo, en el de Pão de Açucar el compartimento no se mueve y pillar un buen sitio para grabar la subida o bajada y sacar fotos es cuestión de mal y "tonto el último"... así que para ambas bajadas, me posicioné en la cola y en cuanto abrieron las puertas me "lancé a las ventanas!!
Una vez más, os dejo los vídeos, primero de la bajada del morro más alto al más bajo y por último el tramo hasta llegar hasta abajo del todo. Tanto el sonido, como la calidad de los vídeos deja mucho que desear, así que no subáis el volumen ni maximicéis pantalla para verlo mejor.
Después de esta segunda visita, la misión Pão de Açucar quedó cumplida!! A pesar de salirnos un poco caro el olvido de mi cámara, hay que decir que las dos visitas fueron muy diferentes, por la distinta luz existente en los dos momentos del día (por la mañana y al atardecer). Quizá me gustó más el atardecer, aunque cuando fuimos por la mañana, eludía estaba súper despejado y la visibilidad era muy buena. En vuestra visita es cuestión de valorarlo, y si podéis hacer ambas, mejor que mejor. Rio es una ciudad tan chula, rodeada de paisajes tan espectaculares, que sin duda cualquier momento es bueno!
Volvimos en uno de nuestros "adorados" autobuses rally (la foto de la izquierda es de uno de los asientos por detrás... me hizo mucha gracia el nombre!! (Ali sabe por qué) y de camino al hotel, como siempre, aproveché a fotografiar un pedacito de arte urbano.
No recuerdo bien dónde cenamos este día, creo que fue en un restaurante que se llama Eclipse, cerca de nuestro hotel. El local está abierto 24 horas y los platos que ponían eran gigantes!! Un sitio muy recomendable para comer o cenar, que además tienen música en directo.
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(C) 2019 Cristina Díaz del Campo
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