Nuestro vuelo a Bangkok era a las 18.45, con lo cual, teníamos la mañana entera para estar en Patong. Yo sinceramente estaba ya hasta las narices de estar ahí, pero aprovechamos para dar una vuelta y volver a buscar un locutorio, al ser día 2, tendría que haber algo abierto!! Pero nada.
Nuestra mañana en Patong consistió en deambular, sentarnos al lado del mar ... un poco plan viejil. Y a la hora de comer, probamos un callejón que había visto yo al que se accedía a través de la calle Rat- U-Thit.... y qué pena no haberlo descubierto antes porque encontramos un restaurante muy, muy guay!!
El sitio en cuestión se llama Song Pee Long 2 y es un sitio que está muy concurrido, con lo cual tardan un poco en ponerte la comida... pero merece la pena, de toda mis estancia en Tailandia, los mejores fried noodle que tomé, fueron los que comí aquí .
Aquí tenéis la fachada por fuera, si vais a Patong, id a comer ahí, el mejor sitio sin duda, y encima barato. Tuvimos la suerte que, mientras comíamos, cayó un chaparrón épico, como cuando bajábamos de View Point en Phi Phi, y por suerte, nos pilló comiendo. No os podéis imaginar qué eficiencia y rapidez del personal del restaurante para bajar toldos y resguardar a los clientes del aguacero en cuestión de dos minutos!!!
Otra cosa que me encantó fueron estos carteles en el baño, con instrucciones para lavar las manos correctamente.
Y las instrucciones del uso de la taza del WC!! En ese momento me chocaron muchísimo, ahora, que ya hemos estado también en China, puedo entender la prohibición de ponerse en cuclillas haciendo equilibrismos...!!!
Después de comer, cogimos un taxi de camino al aeropuerto, que fue un buen rato de trayecto.
Saliendo de Patong, una vez más, carteles de evacuación en caso de tsunami.... debió ser terrible cuando ocurrió!!!
En el aeropuerto no hubo ningún problema por no llevar la tarjeta de embarque impresa. El vuelo fue bien y llegamos al aeropuerto de Don Mueang (donde habíamos vivido la odisea al ir a Chiang Mai) a las 20.20. descubrimos que había un servicio de autobús que nos llevaba hasta Khaosan Road, que nos venía de maravilla porque nuestro hotel estaba en un callejón cercano. Así que por 150 BHT por persona, cogimos este servicio. El bus se llama LimoBus Express. El servicio no es rápido, tardamos en llegar como una hr y media, pero no teníamos prisa y el bus dispone de Wifi gratuito. Creo que es muy buena opción para llegar desde el aeropuerto de Don Mueang a esta zona de Bangkok si uno no va con prisa, claro, porque el tardar más o menos dependerá del tráfico que encontremos.
Aquí os dejo un mapita explicativo de la zona y de donde deja el Limo Bus
Para finalizar nuestro viaje, nos alojamos en el Rambuttri Village. Después de la experiencia en Patong, cuando vi nuestra habitación, casi lloro de la emoción. A ver, no es que me considere una tiquismiquis. Si yo sé de antemano que voy a un alojamiento cutre, pues sé lo que hay. Si me encuentro una mierda calificada como una maravilla en redes, pues me mosqueo. Como punto a favor del antro-alojamiento fue el precio, eso sí. No obstante, finalizar el viaje con un sitio bien donde dormir, es guay!! Además, la zona mola un montón. Cerca del río para coger el taxi fluvial y con tiendas, restaurantes y marcha al ladito. Si vais a Bangkok con tiempo limitado, elegid esta zona, no os defraudará.
El hotel está muy bien, tiene 7Eleven cerca por si necesitáis comprar lo que sea, la habitación que nos tocó era un primer piso, pero bien aislada y con cama cómoda. La decoración de la habitación era muy chula. El desayuno estaba incluido y además tiene piscina en la azotea de uno de los edificios. Hay que tener en cuenta que te piden una fianza de 500 Bht al hacer el check-in!
Después de dejar nuestras cosas en la habitación, nos fuimos a dar una vuelta de reconocimiento de la zona y cenar. El lugar de alojamiento, os lo aseguro, fue todo un acierto, estábamos súper cerca del cachondeo, pero sin tener que aguantar los decibelios!
Primero cenamos en un restaurante del propio Soi Rambuttri. El callejón, que es donde estaba nuestro restaurante, es súper agradable, peatonal y lleno de restaurantes y puestos de Street Food. Hay farolillos colgados, que podéis ver en la foto de abajo a la izquierda.
Luego nos fuimos a Khaosan Road, la famosa calle de los mochileros. Esta calle es una locura, tipo Bangla Road en Patong, aunque el ambiente no tiene nada que ver, aquí no hay los personajes que te encuentras en la primera, ni ofrecimientos de espectáculos sexuales o señoritas bailando en barras. Los locales compiten por poner los decibelios más altos!! Me alegré enormemente de haber cambiado la reserva que hicimos en un principio, ya que el hotel Rikka Inn (sale el cartel en la foto de arriba a la derecha) estaba en medio del meollo. Y la juerga en esta calle se alarga hasta las 3-4 de la mañana!! esta guay para venir, darte una vuelta, tomar algo y luego a tu alojamiento tranquilo a descansar (si tu plan es visitar la ciudad por la mañana y aprovechar el día)
Luego, por último, dimos una vuelta por la calle paralela a Khaosan, Rambuttri Alley. Esta calle también tiene mucho ambiente y muchos restaurantes. También hay mucha gente, pero es bastante más tranquila que Khaosan.
Después del largo día, cogí la cama (limpia y cómodísima!!) con bien de ganas. Al día siguiente teníamos programadas bien de visitas!!
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(C) 2018 Cristina Díaz del Campo
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