PREPARATIVOS PARA RIO DE JANEIRO

Rio de Janeiro fue el primer mega viaje que hicimos trans-oceánico y muchas de las cosas que tomamos en cuenta ahora cuando preparamos un viaje no las hicimos, básicamente por inexperiencia.

Llevábamos con ganas de hacer un viaje grande mucho tiempo y como nos íbamos en Navidad, queríamos buscar un destino en el cual hiciera tiempo de playa y pudiéramos celebrar una Nochevieja espectacular. Así que surgió Rio, y nos pusimos a prepararlo con mucha antelación, ya que nuestro viaje sería en temporada alta-altísima. Nosotros viajamos a finales de 2015, la Ciudad se estaba preparando para los Juegos Olímpicos de 2016 y Rio estaba en pleno apogeo.


PUNTOS EN LOS QUE ACERTAMOS

1. ANTICIPARNOS

Como ya os he dicho en la introducción, comenzamos a preparar el viaje en verano. Nuestro invierno coincide con el verano en el hemisferio Sur, con lo cual es una época de alta demanda hotelera y más en ciudades como Rio, ya que allí en Nochevieja se hace una gran fiesta en la Playa de Copacabana que se llama Reveillon, con una asistencia de más de un millón de personas... pues os podéis imaginar, los hoteles cuelgan el cartel de completo meses antes.

2. NO ALOJARNOS CON AIRBNB

A pesar de que los precios que vimos eran muchísimo más baratos que los hoteles, decidimos no jugárnosla. Y creo que hicimos bien, porque una cosa es lo que te venden y otra cosa es lo que te puedes encontrar (que es algo que he leído en otros blogs sobre Brasil). Que además nosotros viajábamos en una época que vete tú después a buscar otro alojamiento... Además, por otra parte, uno de los requisitos de entrada en Brasil es mostrar carta de invitación o reserva de hotel (la verdad es que a nosotros no nos pidieron nada, pero hay que llevarlo, que nunca se sabe). Si uno se aloja con AirBnB, necesitará contactar con el dueño de la casa/apartamento para que le haga la carta.

3. INSCRIBIRNOS EN EL REGISTRO DE VIAJEROS

Este es un servicio gratuito del Ministerio de Asuntos Exteriores y ya sabéis que lo recomiendo siempre, para que la Embajada sepa dónde andas en caso de emergencia. De hecho descubrí que existía a raíz de este viaje, cuando estuve mirando las indicaciones del Ministerio de Asuntos Exteriores para viajar a Brasil

4. ADOPTAR EL ESTILO BRASILEIRO EN CUANTO LLEGAMOS

¿A qué me refiero con esto? Pues que en cuanto llegamos al hotel, nos cambiamos, nos calzamos unas chanclas, ropa sencilla, fuera bolsos, relojes y objetos de valor a la vista (yo llevaba una riñonera de running con una cartera con el dinero justo, una cámara compacta de bolsillo y un móvil viejo) y nos bajamos a la calle. Es lo mejor que pudimos hacer, no nos sentimos inseguros en ningún momento durante el viaje (y eso que habíamos leído de todo), nadie nos intentó robar ni vivimos ninguna situación tensa. Esto sumado a sentido común hizo que en nuestro viaje no tuviéramos ningún problema, sino todo lo contrario, los brasileños son gente súper simpática y amable, con un espíritu alegre y dispuestos a echarte una mano si lo necesitas.

5. ALOJARNOS EN COPACABANA

Sin duda, es el barrio más chulo (desde nuestro punto de vista), Ipanema es demasiado chic y el Centro no es recomendable de noche... Y además estábamos a tiro de piedra de la playa en la que se celebra el Reveillon!! 

PUNTOS EN LOS QUE NO ACERTAMOS

1. VIAJAR CON UN PAQUETE DE VIAJE DE UNA COMPAÑÍA ONLINE

Estoy segura de que si hubiese brujuleado como lo hago ahora, dada la antelación con la que miramos el viaje, habría encontrado todo más barato. De hecho, otro error es ir dejando tu rastro por Internet, como miramos por muchas webs el mismo viaje para la misma fecha, empezó a subir de precio y al final tuvimos que quitar un día a nuestra estancia porque se había puesto por las nubes... Viajamos con un paquete de Vuelo + Hotel con Expedia. Desde nuestra experiencia posterior, es mejor reservar los servicios por separado.

2. VIAJAR CON EL SEGURO QUE TE OFRECEN EN LOS VUELOS / PAQUETES DE VACACIONES 

Lo mejor es contratar un seguro a parte en el que tengamos bien claro lo que incluye, que las prestaciones médicas sean altas, que nos cubra desplazamientos en vehículos de motor... en fin, un seguro que responda en condiciones en caso de necesitarlo. El seguro que contratamos venía incluido con el paquete vacacional y el condicionado concreto no lo ves hasta que te lo mandan. Respondieron cuando fue necesario, pero creo que la atención fue bastante mejorable con respecto del problema que  tuve. Creo que la compañía era Mondial Assistance.

3. NO ACERCARNOS POR EL CENTRO DE VACUNACIÓN INTERNACIONAL

Aunque estuve mirando las recomendaciones del Ministerio en su página, creo que es más que recomendable visitar el Centro de Vacunación porque te orientan muchísimo mejor. Cuando viajamos nosotros, en Brasil había surgido todo el problema del Zika y eso no venía mencionado por ningún lado. Tampoco nos llevamos repelente de mosquitos... (error garrafal) y aunque estuvimos en Rio, también visitamos zonas de Bosque Tropical así que no sé, lo único que puedo decir es que tuvimos mucha suerte de que no nos picara ningún bicho y nos contagiara alguna enfermedad (o si ocurrió, ni nos enteramos). Como ya os digo, en el Centro de Vacunación Internacional te dan pautas de TODO, incluyendo la alimentación y no sólo de vacunas, para que, como ellos dicen, tu salud también viaje contigo. Podéis pedir cita en el Centro de Vacunación de la calle Francisco Silvela (al que nosotros siempre acudimos) pinchando aquí

4. CONTRATAR UN TRANSFER DESDE EL AEROPUERTO CON LA AGENCIA (EXPEDIA)

A parte de dejarnos más tirados que una colilla, reclamarlo fue un tema porque no contestaban los emails (y encima barato no fue). Desde el aeropuerto de Rio (Galeão) se puede pagar un taxi en los mostradores que hay oficiales, mucho más barato y fiable. Los transfers ofrecidos por las agencias dentro de los paquetes vacacionales suelen ser caros y, como en este caso, inexistentes. Mejor investigar las opciones de transporte desde el aeropuerto al que se llega y, en todo caso, contratar un transfer con el propio hotel/alojamiento al que vayamos. Siempre será más fácil que reclamar a una agencia que está en España.


Y después de esta introducción a los errores y aciertos que tuvimos al planear el viaje... paso a los detalles!!

VUELO

Llegamos a Rio en vuelo directo desde Madrid con Iberia... una gozada no tener que hacer escalas, la verdad (como nos tocó en viajes anteriores). Para la ida fue viaje diurno y nos tocó un avión súper viejo sin programa de entretenimiento en los asientos!! Menos mal que me llevé un libro (que por cierto me lo leí entero, ya que no tuve sueño en ningún momento.


A la vuelta también tuvimos vuelo directo con Iberia, esta vez vuelo nocturno y con un buen avión (yo la verdad es que no aproveché el programa de entretenimiento, porque me quedé dormida sobre las piernas de Diego) 
Es recomendable llevar una almohada cervical para los vuelos tan largos. En las aerolíneas suelen poner almohadas pero poco hacen... Nosotros las empezamos a utilizar desde el viaje a Sudáfrica (que nos dejaron una) y para China ya nos compramos las nuestras... la mejor compra, de verdad!! 


VISADO

Cuando nosotros viajamos en 2015 no era necesario tramitar previamente ningún visado, con el sello te permitían una estancia de 90 días. También había que presentar billete de avión de vuelta, carta de invitación/reserva del alojamiento y solvencia económica (por ej. una tarjeta de crédito, yo recuerdo que me fui a mi banco y todo a pedir un documento y con u recibo de la tarjeta vale... inexperiencia total!!) A nosotros no nos pidieron nada cuando entramos, nos estamparon el sello en el pasaporte directamente.  
Sería necesario comprobar a la hora de viajar que estos requisitos no han cambiado.

ALOJAMIENTO

En este apartado tengo que decir que el alojamiento nos costó carísimo, pero es que Navidades, como ya os dije, es temporada altísima. Nosotros nos alojamos en el Hotel Windsor Martinique y nos encantó su ubicación y el hotel en sí. Muy cerca del transporte público (buses y Metro), no muy lejos de Ipanema, resultó una gran elección y si volviéramos a Rio, me volvería alojar sin duda. Teníamos el desayuno incluido con excelente café y pão de queijo, tan típico brasileño. Además cerca había bares, restaurantes, lanchonettes (que son puestos a pie de calle con carta sencilla, zumos, etc). Además te dejaban toallas y sombrilla para bajar a la playa y el día del Reveillon tuvimos la fiesta con sólo cruzar la Avenida Atlântica!! El personal, súper amable y resolutivo cuando necesitamos su ayuda. Fue caro, pero mereció la pena, sin duda.

VACUNAS Y SALUD

Como ya habéis leído anteriormente, metimos un poco la gamba al no acudir al Centro de Vacunación Internacional. Además recientemente hubo brote de Fiebre Amarilla, con lo cual, si viajáis a Rio, diría que la visita al Centro es obligatoria.
También hay que tener cuidado con los mosquitos, usar repelente. Y crema solar, que el Sol pega que da gusto. La aplicación sería primero la crema solar y continuación el repelente.
Beber agua embotellada preferiblemente y lavar bien la fruta que se vaya a consumir.

SEGURO DE VIAJE

Otra metedura de pata que cometimos. Como siempre, recomiendo IATI y a ser posible una paliza que tenga las mayores coberturas posibles.

DINERO

La moneda de Brasil es el REAL. Un euro equivale aproximadamente a 4 reales. Se admiten las principales tarjetas de crédito. Con el tema del dinero es recomendable llevar el efectivo justo para cada día encima. Y tener precaución al sacar dinero en los cajeros automáticos de la calle. Insisto en que no nos ocurrió nada durante nuestra estancia, pero son precauciones de seguridad que hay que tomar.


Los billetes son muy bonitos, con imágenes de fauna brasileña. Una vez más, mi hermano David nos ayudó a conseguir divisas.


IDIOMA

En Brasil se habla portugués brasileiro. Básicamente es igual que el de Portugal, aunque tiene rasgos distintos a la hora de pronunciar y en ciertos aspectos gramaticales. Desde mi punto de vista es más fácil de entender, tiene una sonoridad más musical. Es como el español de España y el de Sudamérica, el idioma es el mismo, pero tiene diferencias en vocabulario y fonética. 
Si te hablan despacio, se entiende bastante bien, incluso usando "portuñol" (mezcla de español y portugués) no habría problema, pero ellos agradecen mucho cuando intentas comunicarte en portugués.
Aunque ahora hablo portugués, cuando viajamos para allá, en mi caso, no hablaba casi nada. Eso sí. mi Bom día/Boa tarde/Boa noite (para saludar) y Obrigada (para agradecer) siempre lo utilizaba.
(Nota: en Brasil las cosas se piden "por favor" mientras en Portugal se dice "Se faz favor")

EQUIPAJE

He de reconocer que me llevé un maletón... y no hace falta! Allí te puedes comprar lo que necesites  y además la indumentaria va a ser súper veraniega y súper sencilla todos los días. Así que no merece la pena ir cargado hasta la bandera. En todo caso, si se lleva una maleta grande, está bien para tener espacio para traerse cosas. La ropa de baño es espectacular, las Havaianas se venden hasta en los kioscos de la calle... hay muchas cosas chulas para traerse a España!

SEGURIDAD

Bueno, pues aquí llego a uno de los puntos clave, motivo de quebraderos de cabeza de mucha gente que se plantea viajar a Brasil (incluidos nosotros antes de viajar para allá). Infelizmente, Rio no tiene precisamente fama de ser un lugar seguro. Además, noticias aparecidas en los medios sobre sucesos ocurridos en las favelas, hacen que su fama se vea perjudicada.

Rio es una ciudad llena de contrastes. Puedes encontrarte en una zona de pisos de lujo, cruzar una calle y empezar una favela (barrios muy humildes situados en los "morros" o colinas). Hay mucha desigualdad social, y eso ocasiona que haya problemas, claro.
Por eso es tan importante tomar una serie de precauciones, que nosotros seguimos y no nos pasó nunca nada.

- En primer lugar, no llevar a la vista objetos de valor, prescindir de joyas/relojes y cámara y móvil guardados (yo llevaba una riñonera de running con una carterita, fotocopias de nuestro pasaporte, un movil viejo y una cámara compacta) Para hacer fotos, sacaba la cámara, hacía la foto, y la volvía a guardar.
- Llevad el dinero justo para pasar el día
- Evitad la zona Centro el fin de semana. Es que a diferencia de otras ciudades, el Centro no tiene vida cuando acaba la semana, ya que la gente no vive ahí, sino que es donde van a trabajar. Por eso, el fin de semana y por las tardes, que cierran las oficinas, las calles están más bien desiertas. No hay problema para visitar el Centro durante el día y entre semana.
- Los desplazamientos nocturnos se deben realizar en taxi.
- En la playa bajarse con lo justo.
- Y sobre todo.... USAR EL SENTIDO COMÚN!!

Nosotros hemos paseado por la noche por Copacabana y no hay ningún problema, está lleno de turistas y vigilado por la policía y nunca tuvimos ningún percance.
También la zona de marcha de Lapa es segura para salir por la noche, pero hay que realizar los desplazamientos hasta allí en coche.

Los transportes públicos también nos resultaron seguros (independientemente de la velocidad con la que conducen los conductores de autobús!!) incluyendo el metro, que en los convoyes incluyen un vagón exclusivo para mujeres (cosa que me sorprendió, por un lado me pareció bien y por otro medio un poco de pena/rabia que tengan que existir cosas así... Diego entró accidentalmente en este vagón y le miraban como si fuese un insecto.... salimos ipso facto!

COSTUMBRES

Aunque no hay tantas diferencias de costumbres como si viajásemos a un país asiático, sí que hubo algunas cosas que me llamaron la atención de cuando estuvimos en Rio:

- Hay muchos cariocas que le rinden culto al cuerpo. No es para menos, con esas playas, ese clima... hay que lucir palmito! Y en la playa se veía a mucha gente practicando deporte, o corriendo/montando en bici... Además los bikinis brasileños quedan divinos con un buen cuerpo!!
- NO SE HACE TOP LESS. Ojo con esto porque está prohibido. Luego usan biquinis minúsculos, pero el pecho ha de ir cubierto.
- No llevan toallas a la playa. Ellos utilizan los pareos (cangas) para tumbarse y sentarse en la arena.
- En los restaurantes, los camareros te sirven la comida pinceando la cuchara y el tenedor... pero incluso si te pides una pizza, cuando te la traen, te sirven la primera porción en tu plato usando este método... me encantó!! Y me pareció súper profesional.
- Todo va al ritmo brasileiro... con la calma!! Debes armarte de paciencia a esperar que te sirvan!
- En los supermercados hay una caja especial para gente mayor/embarazadas/minusválidos y se respeta de verdad.
- Los brasileiros son escrupulosos con la limpieza y el aseo. Incluso en algún servicio de restaurante nos encontramos hilo dental (como en la foto) o enjuague bucal!! Otra cosa que me encantó.


- Cuando subes al autobús encuentras al conductor y otro operario: el que se encarga de cobrar el billete. Me pareció súper práctico, así el conductor se centra en su tarea y de paso, va acompañado por alguien que no sea un  pasajero brasas.


Ahora os invito a seguir nuestro viaje por la Cidade Maravilhosa. Personalmente me volví enamorada de Rio y tengo muchas ganas de volver a Brasil para conocer otras zonas de este gigante país sudamericano!! La alegría contagiosa de su gente, una excelente gastronomía, clima fabuloso, paisajes y fauna increíbles... merece la pena cruzar el Atlántico para conocerlo mejor!



SIGUE NUESTRAS AVENTURAS EN EL SIGUIENTE POST DE RIO DE JANEIRO:


No se permite la reproducción total o parcial de ninguno de los contenidos o imágenes de este post.

(C) 2018 Cristina Díaz del Campo 











No hay comentarios:

Publicar un comentario